Boya ecuatoriana se integra al Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico

GUAYAQUIL (GUAYAS).- Luego de una serie de fases de prueba de los protocolos de comunicación, una de las boyas ecuatorianas, adquiridas por la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) como parte del proyecto “Fortalecimiento del Sistema Nacional de Alertas Tempranas de Tsunamis en la costa ecuatoriana”, se encuentra integrada al Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (en inglés Pacific Tsunami Warning Center, PTWC), lo cual permitirá medir en tiempo real perturbaciones del nivel medio del mar, cuando se generen movimientos sísmicos-tsunamigénicos, mismos que serán reportados por este Centro al Ecuador como aviso/alerta/alarma, a través del Centro de Alerta de Tsunamis del Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar).
La información se puede revisar en tiempo real en el sitio web http://www.ndbc.noaa.gov/station_page.php?station=32066
La boya está ubicada a 60 millas costa afuera del balneario de Manta, provincia de Manabí, y fue instalada en octubre de 2011, bajo la supervisión de la SNGR, por técnicos del Inocar, entidad responsable de su funcionamiento, y asesora del Estado ecuatoriano en caso de producirse algún evento de esta naturaleza. Precisamente, en la reciente alerta de tsunami, originada el 5 de septiembre anterior, tras el sismo en Costa Rica, la información transmitida por esta herramienta fue fundamental para descartar la amenaza en el país.
Sistemas similares se encuentran operando en Chile, Perú y otros países de la cuenca del Pacífico; por consiguiente, Ecuador fortalece su presencia en la región, en el estudio de los tsunamis y en la gestión temprana del riesgo, en caso de que nuestras costas sean impactadas por este fenómeno.
El proyecto “Fortalecimiento del Sistema Nacional de Alertas Tempranas de Tsunamis en la costa ecuatoriana”, impulsado por la SNGR, tiene como algunos de sus objetivos: elaborar y generar pronósticos alertas/avisos/alarmas y/o predicciones basadas en conocimientos científicos más exactos (junto con los expertos del PTWC), mediante el monitoreo continuo (24 horas), asegurando que la información llegue de manera precisa para responder oportunamente; crear conciencia y sensibilizar a las comunidades asentadas en el filo de costa y mejorar la capacidad de respuesta de las localidades costeras. (TMT)