Un saludo para los hermanos migrantes y la gratitud inmensa por jamás haberse olvidado de su país, lo único que exportó el neoliberalismo fueron seres humanos, más de dos millones de personas expulsadas de su propia tierra después de la crisis bancaria del 99, ellos con sus esfuerzo mantuvieron la economía nacional. Mientras más odio destilan los opositores con sus marchas, como que eso une, da más fuerza, más convicción, más alegría, somos más en las urnas, en las calles y en la conciencia del pueblo.

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